Ahora que se acerca el cambio de armario, y que más de una irá de shopping a por ropa de temporada, creemos que es el momento de que os animéis a hacer un repaso en vuestro closet y deis aquellas prendas que hace mucho tiempo que no os ponéis.

Una de nuestras seguidoras, Paqui Santonja, ha abierto recientemente una Charity shop «Ayudar para ayudar», al estilo de las charity londinenses, y las 15 colgadas queremos poner nuestro granito de arena a la iniciativa. En «Ayudar para ayudar» se nutren de la solidaridad de la gente, tanto en donar cómo en comprar, y lo recaudado es para Caritas. Todos tenemos en casa ropa, complementos y cositas varias (libros, relojes, cuadros) que ya no utilizamos, ocupan espacio y con las que, aunque no seamos conscientes, podemos ayudar a personas que lo están pasando realmente mal. Si os animáis a donar vuestra ropa, poneros en contacto con Paqui aquí, no os imagináis cómo os lo agradecerán. Y si sois de Elche, pasaros por su Charity shop en C/Andres Perpiñán, 12 bajo izquierda, Elche, Alicante.

Os dejamos con este artículo de El País del 7 de octubre de 2013:

Estrena ropa usada

El ahorro y el consumo responsable impulsan el negocio de segunda mano. España se suma a esta moda décadas después que otros países europeos.

Comprar ropa usada en Camden Market londinense o en las pequeñas tiendas de segunda mano del East Village neoyorquino ha sido uno de los entretenimientos favoritos de muchos turistas españoles desde principios de los ochenta. Sin embargo, hacerlo en España era visto como un signo de pobreza. Una percepción que ha ido cambiando a lo largo de los últimos años, (el ahorro ronda el 75%) y de una creciente concienciación de los ciudadanos que, cada vez más, apuestan por la segunda mano como opción de consumo responsable y menos contaminante.

La ropa reciclada empieza a convertirse en una alternativa más de consumo, carente de cualquier estigma. “Tenemos un nivel de consumo que es totalmente insostenible, y consumimos mucho más de lo que necesitamos. Me da igual qué es lo que esté de moda o no. Una prenda de ropa no debe tirarse hasta que esté realmente estropeada, y si tenemos ropa o cosas que no usamos, debemos dejar que otra persona las aproveche. ¿Hay algo mejor para la crisis que comprar a buen precio y, al mismo tiempo, contribuir con una buena causa? No hay nada más enriquecedor que la solidaridad y la generosidad, y poder ayudar a quien lo necesita.

Now that the the weather is about to change, and that more than one will go to shopping for next season clothes, we think it’s time that you feel encouraged to do a review in your closet and donate garments that you don’t wear since long ago.

One of our followers, Paqui Santonja, has recently opened a Charity shop «Ayudar para ayudar» in the style of the London charity ones, and 15 hanging wanted to put our two cents to the initiative. «Helping to help» feeds on the solidarity of the people, both in donating as well as buying, and the takings are for Caritas. Everyone at home has clothing, accessories and various things (books, clocks, pictures) that we no longer use, that take up space and, although we are not aware, we can help people who are in a really bad situation. If you encourage to donate your clothes, get in touch with Paquita here, you can’t imagine how they’ll appreciate. And if you are of Elche, go to her Charity shop in C/Andres Perpiñán,12 bajo izquierda, Elche, Alicante.

We leave you with this article from El País on October 7, 2013 :

Wear used clothing

The savings and responsible consumption drive the business of resale. Spain joins this fashion decades later than other European countries.

Buying used clothing in London Camden Market or small thrift New York’s East Village has been a favorite entertainment of many Spanish tourists since the early eighties. However, doing it in Spain was seen as a sign of poverty. A perception has changed over recent years, (the saving is around 75 %) and an awareness of citizens, who increasingly opt for the second hand option as responsible consumption and less contaminating.

The recycled clothing starts to become an alternative for the consumer, devoid of any stigma. «We have a level of consumption that is totally unsustainable, and we consume far more than we need. I do not care what is in fashion or not. A garment should not be thrown until it’s really spoiled, and if we have clothes or things we don’t use, we should let someone else take them. What’s better for the crisis to buy at a good price and at the same time, contribute to a good cause? There is nothing more inspiring than the solidarity and generosity, and to help those in need.

post by Carla Kissler