Me gustaría compartir con vosotros un día que fue muy especial, en plena montaña del Montseny, para realizar un shooting con Natura Selection. Todo fueron casualidades… Fue llegar al punto de encuentro y ver en un coche a 3 chicas con expresión muy sonriente. A la que bajan del coche, me doy cuenta de que reconozco a una chica, y luego a otra, y a la última también. Dicen que el mundo es un pañuelo, así que Barcelona imagínate, que pequeñita puede ser…

Bonita casualidad, ya que llegamos a formar un cuarteto perfecto para una tarde muy divertida de flashes y más flashes. Y qué decir del resultado, con una fotógrafa de una sensibilidad extrema, que jugaba con las luces y las sombras, y siempre con su cámara analógica. Con un sólo shoot, captaba la esencia del momento.

Realmente la localización que escogieron fue más que acertada, encajaba perfectamente con la colección Fall-Winter y la identidad de Natura.

La ropa por supuesto me encantó. Prendas de lana y algodón, con patrones holgados y minimalistas, con una paleta de colorido que recuerda a un bosque en pleno otoño. Los accesorios son uno de sus puntos fuertes, y el gorro de osito me robó el corazón. Ya me veía con mi hija cada una con uno diferente para los días fríos de invierno.

Espero que os guste y os transmita un poquito de ese aire puro y complicidad entre las cuatro que se respiraba ahí.

Let me share with you a very special day, in Montseny’s mountains, for a shooting with Natura Selection. All were coincidences… It was reaching to the meeting point and seeing inside a car 3 girls with smiling expression. As they get of the car, I realized that I recognized a girl, and then another, and then the latter also. They say it’s a small world, so imagine Barcelona how tiny it can be…

Nice coincidence, as we got to form a perfect quartet for a fun afternoon of flashes and flashes. And what about the result, a photographer of extreme sensitivity, playing with lights and shadows, and always with the analog camera. With just a shoot, she captured the essence of the moment.

Really the location they chose was more than successful, it fit perfectly with the Fall-Winter collection and the identity of Natura.

Of course I loved the clothes. Wools and cotton, loose and minimalist patterns, with a colorful palette reminiscent of a forest in Autumn. Accessories are one of their strengths, and the bear bonnet stole my heart. I saw myself with my daughter each wearing a different one for the Winter cold days.

I hope you like it and it transmits a bit of fresh air and the complicity we felt amongst the four of us there.

post by Gina Carreras